Con este oficio religioso, el Ejecutivo apuntó a construir puentes con los sectores opositores y tener espacios de diálogo y que sea el puntapié inicial de una convocatoria para “reencauzar la convivencia democrática” tras el intento de magnicidio.
Con este oficio religioso, el Ejecutivo apuntó a construir puentes con los sectores opositores y tener espacios de diálogo y que sea el puntapié inicial de una convocatoria para “reencauzar la convivencia democrática” tras el intento de magnicidio.