Feliz y tranquilo tanto arriba como abajo del escenario, Barrionuevo trajo al Festival un rincón melómano rodeado de guitarras, un piano, una máquina de sonidos y un bombo legüero. En esa suerte de living, recibió al exLos Nocheros y a Pastorutti.
Feliz y tranquilo tanto arriba como abajo del escenario, Barrionuevo trajo al Festival un rincón melómano rodeado de guitarras, un piano, una máquina de sonidos y un bombo legüero. En esa suerte de living, recibió al exLos Nocheros y a Pastorutti.