La medida permitió el paso por el puesto fronterizo de Alican, cerrado desde 1988, de cinco camiones con insumos para asistir a las víctimas del terremoto que el lunes sacudió a Turquía y Siria y que dejó un saldo fatal de 25.000 personas.
La medida permitió el paso por el puesto fronterizo de Alican, cerrado desde 1988, de cinco camiones con insumos para asistir a las víctimas del terremoto que el lunes sacudió a Turquía y Siria y que dejó un saldo fatal de 25.000 personas.