El plantel sabalero comenzará a poner la cabeza en el Pincha, a quien recibirá el sábado desde las 15, tras la suspensión del choque ante Morón.

Colón pondrá desde este lunes la mente puesta en Estudiantes de Buenos Aires, luego de un inesperado parate por la suspensión del duelo ante Morón. El DT Andrés Yllana deberá decidir en los próximos días si sostiene el equipo que tenía pensado para jugar en el oeste bonaerense o si aprovecha la localía y el rival para hacer modificaciones de corte ofensivo.

El once que había ensayado para enfrentar al Gallo proponía un 4-4-2 de corte equilibrado, con Marcos Díaz en el arco; Garrido por derecha (reemplazando al lesionado Sánchez), Thaller y Negro como centrales, y Castet en el lateral izquierdo. En el medio, Talpone regresaba tras su suspensión para aportar experiencia junto a Forneris, mientras que Yunis se metía como volante mixto y Lago se paraba más libre por izquierda. Arriba, Barreto y Gigliotti formaban la dupla de ataque, apostando a la presión y el juego directo.

Pero ahora el panorama puede cambiar. La posible recuperación de Gonzalo Bettini y Genaro Rossi abre la puerta a nuevas alternativas, especialmente si el técnico decide tomar la iniciativa en casa. Bettini podría disputar un lugar en el lateral derecho con Garrido, mientras que Rossi podría sumarse a un frente de ataque con mayor peso ofensivo.

Además, no se descarta que Yllana modifique el esquema o los intérpretes para aumentar el volumen de juego. ¿Un mediocampo más ofensivo? ¿Un tercer delantero? Todo dependerá del plan que el cuerpo técnico elija para superar a un rival que llega golpeado y fuera de los primeros puestos.

Colón tiene tiempo para planificar, ajustar y, sobre todo, para ratificar su candidatura en la Zona B. El sábado será una buena prueba para demostrar si el equipo tiene la capacidad de reinventarse según las circunstancias.

Fuente: LT10.